Cronograma capilar: todo lo que necesitas saber

Unas de las cosas más interesantes que he aprendido en los últimos tiempos es el Cronograma capilar. Cuando mi cabello estaba hecho un desastre y comencé con el objetivo de dejarlo crecer (Proyecto Rapunzel) conocí el Cronograma Capilar y bueno, hoy quise explicarles y compartirles mi experiencia.Pero primero lo primero.

¿Qué es el Cronograma Capilar?

El Cronograma Capilar es una agenda de tratamientos: para recuperar el cabello muy maltratado y para mantener el cabello saludable.

 Es una rutina que busca dejar el cabello saludable por más tiempo, reponiendo todo lo que el cabello necesita. Se compone de tres etapas: hidratación, nutrición y reconstrucción.

Por eso todo cronograma capilar depende de una agenda: a cada día de lavado se usa un tratamiento específico para reponer los componentes que el cabello necesita.

 Esto porque el uso constante de secadores, planchas alisadoras, tenazas, la exposición al sol, la contaminación ambiental, baños calientes y procedimientos químicos como tintes, dejan el cabello quebradizo, sin vida y con frizz. 

Son agresiones diarias que dejan evidentes marcas en la salud del cabello y con el tiempo es necesario reponer estos componentes.Cualquier persona puede realizar un cronograma capilar, ya que su objetivo es dejar el cabello saludable. 

Se realizan una serie de tratamientos que intercala hidrataciones, con nutrición/humectación y reconstrucción para mantener (o ayudar a recuperar visiblemente) la salud del cabello. Confieso que no encontré ninguna fuente científica que sustente su eficacia, pero voy a contarles un poco sobre sus pros y contras y las polémicas sobre esta práctica. 


¿Cómo funciona?
Durante un mes hay que lavar el cabello tres veces a la semana, si tres veces a la semana.

 En cada día hacer un tratamiento específico, sumando un total de: 7 hidrataciones, 4 humectaciones y 1 reposición de proteínas. Debe existir una pausa de 48 horas entre un tratamiento y otro.

¿Es necesario hacer un cronograma capilar?

Con la exposición al viento, al sol, los cambios climáticos y los lavados del cabello este va perdiendo su fortaleza natural con el tiempo. Y, sí esto sucede de forma natural, ¿Imagina en los cabellos químicamente tratados? 

La única diferencia entre los cabellos “vírgenes”, lisos, crespos, rizados, ondulados o que recibieron algún tipo de química, son sus necesidades. Evidentemente el cabello “virgen” no necesita utilizar tantas mascarillas como un cabello químicamente alisado. 

Una vez que la hebra es modificada por tintes/coloraciones, alisamientos o descoloración, la estructura de la hebra cambia permanentemente. Por esto son importantes los cuidados contantes, porque así conoceremos a fondo nuestro cabello y entenderemos mejor sus necesidades. 

El Cronograma Capilar se compone de tres etapas
Hidratación, Nutrición/Humectación y Reconstrucción.

Hidratación: 

Reposición de agua.El agua es la base de todo, es la base de la vida y por supuesto nuestro cabello no es la excepción. Por cierto, ¿Ya tomaste agua hoy?

 La hidratación es la etapa más importante, y debe ser aplicada antes de cualquier otra no ciclo del cronograma. 

La reposición de agua (de ahí la palabra hidro) en el cabello es fundamental, pues sin ella, ninguna reposición de aceites o de proteínas consigue anexarse en las hebras por mucho tiempo. 

Y además, permite fijar otros componentes de la etapa del cronograma, el agua en las hebras devuelve la elasticidad, dejándolo fortalecido y resistente al quiebre. 

• Los principales compuestos hidratantes: extractos botánicos, bepanthol (panthenol o pantenol), sábila (Aloe Vera), miel pura, glicerina, siliconas, sacarosa y derivados del Azúcar.

•  La falta de hidratación deja el cabello: opaco, sin brillo, seco, se enreda fácilmente y estático.

• ¿Con que frecuencia debo hidratar el cabello?                          La hidratación debe realizarse siempre, teniendo en cuenta un intervalo de descanso entre un lavado y otro, más o menos a cada dos o tres días. 

 Nutrición: reposición de aceites.

 Erróneamente llamada nutrición (luego les explico por qué), en esta etapa se reponen aceites.

No piensen que aplicando aceites en el cabello este quedara grasoso, no es cierto heheh. 

La función de los aceites es garantizar la oleosidad o humectación natural, la deja controlada para formar (así como las glándulas sebáceas de nuestro cuero cabelludo) una capa protectora en toda la hebra, sin embargo, es bien sabido que el aceite no se mezcla con el agua –y es por eso que esta etapa es la forma de mantener (sellar) la hidratación en el cabello. 

Esta capa protectora promovida por la humectación  deja las cutículas más cerradas, dando un brillo saludable al cabello. 

¿Ya entienden porque hay un orden entre una etapa y la otra?

Ni se te ocurra pensar que cualquier aceite de cocina sirve para humectar el cabello, todo lo contrario –ese tipo de aceite es mezclado con antioxidantes y otras cosas para quedar refinado y tener un tiempo de vencimiento mayor, perdiendo casi todas sus propiedades. 

Los mejores aceites para humectar el cabello son aquellos 100% naturales, de origen vegetal y prensados en frío. ü  Compuestos humectantes: aceites vegetales 100% naturales, como el aceite de coco y de Oliva. También los aceites de Ricino, Argán, Jojoba, Macadamia, Uva… y mantecas vegetales como las de Aguacate, Karité y Cacao.

•  La falta de humectación deja el cabello lleno de frizz, porosos y con aspecto aplastado.

 ¿Con qué frecuencia debo humectar mi cabello?

A no ser que tu cabello pierda humectación con facilidad, como sucede en el cabello afro/rizado (debido a la estructura de la hebra en formato de spring, lo que dificulta que la humectación se distribuya hasta las puntas), la reposición de aceites puede hacerse una vez a la semana.

Reconstrucción: reposición de proteínas.

 Erróneamente llamada reconstrucción, luego les explico por qué.


 La composición del cabello es básicamente Carbono, Hidrógeno, Nitrógeno, Oxigeno y Azufre – de los cuales, en conjunto, forman una proteína llamada Queratina que representa 85% de la composición del cabello, completado por 12% de agua y 3% aceites. 

La etapa de reposición de proteínas es la etapa más importante del cronograma y merece una atención especial, pues es la última fase y crea la base a la estructura de la hebra. 

Esta etapa es responsable por devolver las proteínas a las hebras temporalmente y fortalecer su estructura. ü  Principales compuestos reconstructores: queratina hidrolizada, aminoácidos (forman cadenas proteicas) como: arginina, alanina, serina, prolina, valina, treonina, cisteína e isoleucina, colágeno, proteína hidrolizada de trigo.

• La falta de proteínas deja el cabello: más fino de lo que naturalmente es, quebradizo, con puntas abiertas, elástico (parece un chicle).

 ¿Con que frecuencia debo reponer proteínas?

Para cabellos saludables, puede ser hecha una reposición de proteínas al mes, o solo cuando sea necesario (después de lavar el cabello previamente alisado con calor), para cabellos químicamente tratados (desrizados, tintes, descolorantes) quincenalmente. 

Y para cabellos muy maltratados puede hacerse una vez la semana hasta que mejore la estructura del cabello, en estos casos creo que lo mejor es ir a un Tricologista o un Dermatólogo.

     

Aun con técnicas menos agresivas para lavar el cabello como Low/No poo –que busca disminuir la perdida de compuestos naturales del cabello, eliminando el uso de productos con sustancias agresivas- ninguna técnica evita al 100% la perdida de estos compuestos, así como ninguna técnica promete recuperar al 100% la salud del cabello. 

Y justo ahí inicia la polémica sobre el Cronograma Capilar, pues quien sigue esta técnica sin conocimiento de causa, cree y difunde ciegamente que el cabello se va a regenerar, como si esta fuese la salvadora de la patria. Y no es cierto, les explicare el porqué. Lo que sucede es que muchos olvidan de algo básico que aprendimos en la escuela: el cabello es un tejido muerto. 

Como les mencioné en el comienzo de este post, el cabello está compuesto por 85% de Queratina, o sea, es prácticamente proteína pura y, por esto es incapaz de regenerarse. No hay células “vivas”, solamente cadenas de proteínas y algunos otros compuestos que ya les mencioné. Realmente no hay una etapa de “reconstrucción” y mucho menos de “nutrición”, ya que el cabello no posee ningún compuesto bioactivo para ser regenerado y no “come” nada para ser nutrido. 

Creo que la única etapa que realmente cumple su propósito es la hidratación pues el cabello realmente capta/absorbe moléculas de agua, devolviendo la elasticidad natural y todo aquello que les mencione en esa etapa. 


¿Cómo funcionan realmente las etapas de “nutrición” y “reconstrucción”?

 Aunque el cabello es un tejido muerto, como las uñas, guarda en su estructura física y química un registro especifico de todo lo que ingerimos o aplicamos externamente, revelando lo que comemos, a cuales productos tóxicos nos exponemos, donde vivimos y nuestro estilo de vida.

A pesar de no estar “vivo” y ser incapaz de regenerarse, no significa que el cabello sea insensible a lo que depositamos sobre él. Imaginen una blusa: sí le ponemos suavizante, la blusa quedará más suave. Y sí la lavamos muchas y muchas veces el tejido puede quedar débil, dañarse o quebrarse fácilmente? 
¿La blusa es un ser vivo? No, y eso no significa que no pueda ser bien cuidada. La historia con el cabello es algo parecida. Sí el cabello fuese tan indestructible no existiría el cabello poroso, maltratado, sin brillo y quebradizo. Sí estos daños pueden suceder, también hay formas de amenizarlos.


¿Y que aprendimos con todo esto? 

Podemos concluir que el cronograma capilar puede mejorar el aspecto del cabello, y tiene una función de mantener el cabello visiblemente más saludable hasta donde sea posible. El error viene en los nombres dados a las diferentes etapas y por habito-imposición del mercado y el boca-boca, usamos equivocadamente. Hasta ahora no encontré una fuente confiable de quien creo esta técnica, pero me atrevo a pensar que surgió en algún salón de belleza para vender más productos.

 ¿Cómo crear un Cronograma Capilar?

Identifica que necesita tu cabello (lo expliqué en cada etapa) y la frecuencia con que debes realizar cada etapa. Existe una tabla básica que consiste en:

Lunes	Martes	Miércoles	Jueves	Viernes	Sábado	Domingo
Hidratar		Hidratar		Nutrir
Hidratar		Hidratar		Nutrir
Hidratar		Hidratar		Nutrir
Hidratar		Hidratar		Reponer Proteínas

  Puedes usar esta tabla básica para iniciar y luego con el tiempo ir analizando las necesidades de tu cabello. Porque no todos los cabello se comportan igual y todos tenemos necesidades diferentes. 

¿Qué puedo usar?

Para cada etapa hay un producto específico. Hay formas de hacerlo todo con un solo tratamiento, pero para mejores beneficios lo ideal es tener un tratamiento/mascarilla para cada etapa.  

Necesitarás:


Mascarilla de hidratación: responsable de la reposición hídrica (agua) en la fibra capilar.

Mascarilla humectante: para reponer aceites al cabello.

Mascarilla con proteínas: para reponer proteínas a las hebras. Por ejemplo: el lunes te toca hidratar, lavas el cabello, aplicas una mascarilla hidratante, luego acondicionador. Finalizas como de costumbre. Cuando te toque humectar usas la mascarilla humectante y así sucesivamente.

 ¿Cómo identifico el tipo de mascarilla?

Para identificar cual o que mascarilla capilar es hidratante, humectante o para reponer proteínas, necesitas leer la composición y buscar ingredientes hidratantes. Normalmente las marcas ya lo especifican en la etiqueta, así que es solo leerlas.

Hice el cronograma capilar por unos 6 meses. Realmente sentí un cambio increíble en mi cabello, estaba muy maltratado porque durante el embarazo todos los productos para el cabello me daban nauseas, así que solo usaba shampoo o simplemente lo humedecía.

 Pros:  Ayuda a recuperar cabellos muy maltrados rápidamente.

• Te permite crear disciplina en el cuidado capilar, te mantienes constante y entusiasmada.
• Te permite conocer tu cabello, aprendes a identificar que le hace bien, que productos le gusta y cuáles no.

Contras 

•  Tiempo. Hay que invertir mucho tiempo para lavar el cabello 3 veces a la semana.
• Dinero. Hay que invertir en productos para cabello y no necesariamente son baratos.
•  No es un método para usarlo por más de 2-3 meses. En mi opinión la practica de Cronogramas Capilares accesorios (muchos que aparecen por Internet) para cabellos muy maltratados, con tintes y etc… es una perdida de tiempo. 

• Lo importante es identificar las necesidades del cabello y tratarlo de acuerdo a eso. Si los problemas persisten por más de dos-tres meses hay que buscar ayuda de un profesional.

  

¿Vale la pena hacer un cronograma capilar?

Todo dependerá de las necesidades de tu cabello, no me parece un método útil para cabellos saludables, es ideal para recuperar cabellos maltratados. 

¿Conocías el Cronograma Capilar?